Jóvenes decidieron honrar a Dios uniendo sus vidas
Así fue el matrimonio de cuatro jovenes cristianos en el municipio Pedernales.
Este 27 de septiembre se realizó un magno evento en la capital del municipio.
El matrimonio fue de una pareja guarao y una criolla.
Jóvenes que cumplieron con los parámetros establecidos por el Eterno de guardarse para su esposo.
La ceremonia eclesiástica se llevó a cabo en la Cámara Municipal, donde hubo una participacion activa de la comunidad criolla y guarao,
Luego el compartir con hermanos y amigos, en la calle Sur de la localidad, participando la agencia de festejos el Paraíso de Tucupita.
Un evento muy ameno lleno de palabras motivadoras para los esposos y el público presente, y la participación de la población guarao, cantos, alabanzas y danzas llenaron el lugar, la alegría era contagiosa; Los invitados de otras ciudades disfrutaron del momento a lo máximo, el joven adorador Moisés Martínez animó la actividad.
Los esposos manifiestan que tuvieron una espera de 6 y 8 años hasta que su Padre Celestial les bendijera con la persona idónea.
Y el Creador cumplió su promesa, no solo de indicarles la persona sino que los bendijo con una gran ceremonia, muy significativa para el municipio, ya que la comunidad conoce a estos jóvenes desde muy pequeños, era transferible la alegría que se sentía en chicos y adultos en un evento tan grande.
Actividad que en estos tiempos llama a nuestra juventud a seguir el ejemplo, de fidelidad a su Creador y El recompensa con lo mejor.
«Con Jhesua nunca se pierde, valió la pena esperar el tiempo de mi Señor es perfecto»: dice este joven esposo, Jesús Castillo, igualmente la jovencita Ana Karina de Castillo, «vale la pena creerle al Señor y guardarnos para El».
Y terminan diciendo lo único que queremos es que Cristo siempre sea el centro de nuestro matrimonio.
